técnica 32 revistatoldo el material de la estructura principal, ya sea hecha de ladrillos, madera, hormigón, acero u otros. Es esencial que los anclajes se unan a un elemento estructural del edificio. En consecuencia, el mejor anclaje para casi cualquier edificio es un perno pasante, que se perfora a través de toda la superficie de soporte estructural y se sujeta con una tuerca en la parte posterior. Los anclajes de fijación del toldo a un sustrato de acero o de madera accesibles son fácilmente atornillables de esta forma. Sin embargo, cuando el marco tiene que anclarse a un sustrato de madera inaccesible y no puede ser a través de atornillado, puede que no haya más remedio que utilizar tornillos de cabeza cuadrada. La resistencia de los tirafondos se ve afectada de manera significativa por la especie, el estado y el espesor de la madera. Además de la fuerza del propio tornillo, el factor limitante de la madera tiene que examinarse al hacer este tipo de conexión. Para el anclaje en una estructura de ladrillo, se recomiendan los tornillos de anclaje autorroscantes o los pernos de expansión. Varios tipos de elementos de sujeción están disponibles para su uso en hormigón. Los tres tipos comunes son: los anclajes de expansión, donde el tornillo contiene una cuña y está rodeado por un manguito o taco (pegar o atornillar el tornillo empuja la cuña contra el manguito y los bordes del agujero); pernos de anclaje con gancho, que se encuentra en anclajes de hormigón húmedo y finalmente los anclajes químicos, que usan resinas epoxi para fijar los tornillos de anclaje en su lugar. Anclajes químicos Algunos fabricantes de toldos están en desacuerdo sobre el uso de anclajes químicos, que ofrecen ventajas y desventajas que deben sopesarse cuidadosamente. Un anclaje químico se utiliza normalmente en la albañilería. Los dos tipos básicos de anclajes químicos son el basado en cápsulas y el método de inyección. Las cápsulas, un tubo de vidrio que contiene el endurecedor y la resina, se colocan en un orificio taladrado previamente. La perforación a través del tubo con un tornillo de anclaje rompe la cápsula, así se mezcla la resina epoxi y la libera. En cuanto al método de inyección, el sistema más práctico en uso hoy en día, se compone de un cartucho de bicomponente, con el que la resina se suministra con una pistola especial, y el uso de un mezclador estático en el que los componentes se proporcionan en paralelo y se mezclan al pasar a través de una “espiral” (mezclador estático) interna a la boquilla. Una vez se ha colocado la resina dentro del orificio se inserta el tornillo de anclaje. Dentro de la parte sólida del sustrato (hormigón, piedra, ladrillo…) el adhesivo se une éste y al tornillo, fijándolo. Si se fija a materiales con huecos interiores, como algunos ladrillos, los adhesivos se distribuyen ocupando su interior y fijando el tornillo con una base de resina incluso más amplia. Anclaje en cápsula Sección de anclaje químico La resina se distribuye dentro del hueco uniformemente La resina se aplica con una pistola especial
Revista Toldo Nº 6 2014
To see the actual publication please follow the link above