técnica 23 revistatoldo La luz impresa es el resultado de la impresión de diversas tintas funcionales sobre sustratos flexibles, que colocadas de forma estratégica, al hacer pasar una corriente eléctrica por ellas, éstas tienen la capacidad de convertir la energía eléctrica en luz. Este fenómeno es conocido como electroluminiscencia. Como ejemplos de sustratos flexibles estarían los tejidos domésticos (algodón, poliéster) o tejidos técnicos como PVC o Nylon. También sustratos flexibles plásticos pueden ser utilizados, como por ejemplo PET (tereftalato de polietilenglicol) o KAPTON (film de poliimida). Incluso con el avance tecnológico en acabados en la industria del papel, papeles técnicos pueden ser también empleados como sustrato flexible para la impresión de dispositivos electroluminiscentes. El principal objetivo del proyecto ROLLING LIGHTS – “Investigación en dispositivos de iluminación flexible mediante técnicas de deposición “roll to roll” para aplicaciones destinadas a la arquitectura textil o la protección solar” es dotar al sector de nuevas tecnologías para poder crear nuevos productos con iluminación flexible integrada, con fines tales como la iluminación ambiental, la visibilidad o el marketing publicitario, entre otras. La estructura general de un dispositivo electroluminiscente es el que se muestra en la figura 1. Técnicamente la electroluminiscencia se genera cuando se aplica tensión entre los dos electrodos mediante un inversor de corriente que convierte un pequeño voltaje en corriente continua a un voltaje grande en corriente alterna. Así la capa activa llamada habitualmente fósforo, se excita y los electrones se desplazan a estados de energía superior (absorbiendo energía) y estos al relajarse liberan energía emitiendo luz. El tipo de luz que emiten estos dispositivos flexibles es básicamente luz de cortesía, no siendo equiparable a la cantidad de luz que, por ejemplo, podría emitir un LED (light emitting diode). A diferencia de los LEDs, las sustancias activas que generan luz, en este tipo de dispositivos electroluminiscentes son limitadas y, por tanto, los colores que pueden obtenerse también lo son. Los colores básicos son: el blanco, el azul, el verde y el naranja, siendo posible conseguir otras combinaciones de colores mediante la aplicación de filtros. La cantidad de luz emitida siempre estará relacionada con la electrónica de control del dispositivo. A mayor potencia mayor cantidad de luz emitida y mayor consumo y viceversa. Por tanto encontrar un equilibrio entre luz emitida y consumo, es un objetivo del proyecto ROLLING LIGHTS. Figura 1
revistatoldo nº4 2015
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