PROYECTO
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La envoltura textil de aproximadamente
2.100 m2 que consta de paneles
individuales ondula alrededor del
cubo, alternándose delante y detrás
de los cables. Tanto los cables como
la membrana están fijados a una estructura
de acero hecha de arcos de
acero horizontales. Formados a partir
de secciones huecas cuadradas, los
diferentes radios de curva prestan una
dinámica particular a la cubierta en
forma de onda. En la parte superior,
están anclados al edificio por soportes
y puntales de acero, conectados con
bisagras.
Los refuerzos inclinados fueron una
guía necesaria para la carga en la estructura
de hormigón con el fin de garantizar
la estabilidad de la piel de la
fachada del muro cortina. En el extremo
inferior, la carga se transfiere directamente
a la placa de suelo y al techo
del garaje subterráneo. Además de los
paneles de tela de diversas formas y
la distancia, que en ocasiones es muy
grande, entre la cubierta y la estructura
de hormigón, la penetración del
aislamiento en el exterior del edificio
también se convirtió en un desafío en
términos de estática.
Para darle a la “prenda” un aspecto lo
más ligero posible y para ocultar en
gran medida la estructura, ésta no